Vamos a ver las categorías más destacadas de efectos visuales 3D
Los efectos visuales 3D o VFX son un término paraguas que engloba un amplio abanico de disciplinas y técnicas bajo un denominador común: la creación de imágenes íntegramente generadas por ordenador (CGI) en lugar de grabaciones del mundo real.
El sinfín de recursos visuales y su increíble evolución ha hecho que cada vez más empresas hayan integrado efectos visuales para ser más atractivos para el usuario sus tráilers, anuncios, películas, videojuegos, simulaciones…
Elementos 3D
El CGI es ya fundamental en el cine y los videojuegos. Casi todos los productos de entretenimiento de gran éxito están hechos total o parcialmente mediante efectos visuales 3D. La creación de objetos 3D consta de varias fases.
En primer lugar tenemos el modelado, ya sea tradicional o mediante esculpido, de personajes y objetos.
El mismo modelador o un lookdev artist se encargará del texturizado, pintando los modelos y asignándoles materiales para que luzcan atractivos y realistas.
Con el aspecto visual cerrado, se dotará a los modelos de un esqueleto (rigging) que se usará para mover y dar vida a los personajes y objetos movibles (animación).
Posteriormente, un artista de iluminación utilizará la luz para realzar el trabajo realizado y la narrativa de cada escena. Si el producto final es en formato vídeo (no interactivo), se renderizará la cinta.
Live action
Las imágenes captadas del mundo real (o live action) pueden combinarse con efectos visuales 3D con resultados sublimes.
Criaturas imposibles se muestran frente a frente con actores o paisajes reales, como si coexistieran. Hay varios métodos de fusionar ambos mundos:
CAPTURA DE MOVIMIENTO (MOCAP por sus siglas en inglés):
Se usa para dotar de hiperrealismo a las animaciones de personajes CGI.
Recubiertos de sensores desde la frente hasta los talones, los actores humanos graban las escenas y se registran sus movimientos. Posteriormente, los animadores pulen estos datos y los aplican a modelos virtuales.
MATCH MOVING:
Cuando se combinan elementos reales con virtuales se recurre al match moving, es decir, el uso de objetos auxiliares en la grabación con la misma escala y colocación que tendrá su versión digital.
Al hacer el objeto 3D, se ilumina basándose en el metraje real para facilitar la integración y ganar credibilidad.
MORPHING:
Es un vistoso efecto en que una imagen real se distorsiona y transforma en otra persona u objeto hechos por ordenador. Estas transiciones han sido copiosamente usadas en el cine, por ejemplo, en la saga Terminator.
CROMA KEY:
Técnica ampliamente utilizada en la industria audiovisual, consiste en sustituir el fondo por un telón, usualmente verde o a veces azul, según la ropa usada por los actores. En postproducción se elimina el fondo y en su lugar se aplica una imagen prerrenderizada o un vídeo.
De esta forma, grandes porciones del rodaje se realizan en un estudio en vez de en el exterior, abaratando costes y posibilitando escenas otrora inviables.
La evolución del croma está llegando de mano de herramientas típicas de videojuegos tales como Unreal Engine.
En vez de un telón, es posible usar paredes de leds que muestren escenarios renderizados en tiempo real, dando a los actores una mayor inmersión y a los supervisores una imagen más cercana a la final.
Así la propia pantalla se usa para iluminar a los actores, su perspectiva cambia según la posición o configuración de la cámara y el director puede interactuar con el escenario y cambiarlo de un plumazo. Se trata de un salto adelante en tecnología que todavía tiene mucho por demostrar.
Efectos visuales 3D en postproducción
Si bien VFX se refiere a cualquier elemento generado por ordenador, a menudo utilizamos el término para referirnos a aquellos efectos adicionales que suelen incluirse en la postproducción de una película o serie.
Algunos ejemplos son efectos climáticos, explosiones, humo, fuego, agua, efectos de partículas, derrumbes de edificios…
La realización de estos efectos suele entrañar una sofisticación tal que los artistas de VFX se especializan en dominar solamente uno o unos pocos.
No sólo la técnica es compleja, sino que se requiere de una gran sensibilidad artística para que su integración en la escena dé el resultado deseado y no abrume o resulte artificial.
Asimismo, existen muchos programas con funcionalidades para crear este tipo de visualizaciones, siendo Houdini el que se ha erigido como estándar del sector.
El pipeline audiovisual termina con la composición digital, donde organizan e integran elementos provenientes de varias fuentes (metraje real, fotografía, animaciones 2D o 3D, textos…) en un todo cohesionado.
El compositor emplea un software como Nuke o DaVinci Resolve para combinar los pases de render, VFX de postproducción, matte painting, etc. y transformarlos en el frame final que vemos en pantalla.
Por último se realiza el etalonaje (colour grading) de todos los planos, corrigiendo su contraste y color para lograr una cohesión artística y el tono adecuado (alegría, melancolía, terror..) a cada escena.